viernes, 20 de mayo de 2011

La Red de Municipios Potencialmente Saludables del Brasil


Escribir sobre la Red de Municipios Potencialmente Saludables (RMPS) es escribir sobre su líder y gestora, la Dra. Ana María Girotti Sperandio, a la que tuve el gusto de apoyar durante cerca de tres años, dando continuidad a la labor de Miguel Malo, excelente amigo y mejor promotor de la salud. La Dra. Sperandio pertenece a una pléyade de mujeres brasileñas con empuje y fuerza, capaces de desarrollar exitosamente los proyectos que emprenden. Ella es sin duda el puntal de esta red brasileña que engloba a cerca de 40 municipios de seis estados diferentes.

La Red fue creada en 2003, inspirada en los proyecto de municipios saludables que impulsaba la OPS. Como gran parte de las redes de entonces no se le puso el nombre de “saludable” porque la palabra denotaba un calificativo demasiado ambicioso, de un status difícil de alcanzar. Si la red mexicana se bautizó en  1993 como de Municipios Por la Salud, la brasileña  fue aún más cauta al llamarse de municipios “potencialmente” saludables, o sea, que podrían llegar a ser saludables si encaminan sus políticas correctamente, persiguiendo el mejoramiento de la salud de su población de manera multisectorial y participativa.

El proyecto que dirige la Dra. Sperandio tiene su centro de operaciones en la Universidad Estatal de Campinas, donde recibe el necesario apoyo para sus acciones de trabajo con la comunidad. La Red es uno de sus mejores proyectos de extensión universitaria, por su  trabajo efectivo con una serie de instituciones colaboradoras, principalmente los municipios participantes. Trabaja en estrecha relación don el Instituto de Pesquisas Especiales para la Sociedad (IPES),  dirigido por el prestigioso Profesor, Humberto de Araujo Rangel.

Por ser un proyecto basado en una Universidad con el nivel de la UNICAMP, el trabajo hacia el exterior de la universidad no es de puro activismo, sino que busca equilibrar la teoría con la práctica, razón por la que sus acciones son permanentemente sistematizadas en documentos, artículos y, principalmente, en la publicación de libros con contenido esclarecedor de sus estrategias y proyectos. En la actualidad tiene publicados un total de siete libros.

Fue en municipios brasileños que se impulsó la planificación estratégica participativa, donde tanto las políticas, sus prioridades, así como la alocación de los recursos se discuten con los sectores organizados de la sociedad civil. O sea, la planificación deja de ser un ejercicio puramente técnico, para convertirse en un ejercicio participativo, de comunicación y discusión con la comunidad. Fruto de este ejercicio es la elaboración de un plan maestro o director, con fuerte base consensual. Una de las características de la Red de Municipios Potencialmente Saludables es la de impulsar planes directores participativos, que por su propia naturaleza son multisectoriales. Este solo hecho nos muestra el concepto de salud amplio e integral con el que se maneja la Red. Sus acciones son diversas y tienen que ver con todos los sectores y dependencias municipales: renta, empleo, medio ambiente, seguridad,  estilos de vida, seguridad alimentaría, educación  y participación comunitaria. En otras palabras, la Red promociona y trabaja sobre las principales determinantes sociales de la salud, lo que la convierte en un efectivo instrumento de promoción de la salud.

La Dra. Sperandio articula la Red con un pequeño grupo de colaboradores, que mantienen el flujo de comunicación con todos los municipios de manera directa y a través de su propia Web (http://www.redemunicipiosps.org.br/wordpress/).  Más allá de la comunicación epistolar, el seguimiento personal y la presencia permanente de ella en los municipios y en diferentes eventos son la garantía de su permanencia y sostenibilidad. Los municipios de la red no son precisamente cercanos unos de otros. Estuve con ella en algunos, pero me fue imposible acompañarla a la mayor parte de ellos, tal como hubiese sido mi deseo. Personalmente siempre quedé con un sabor a falta cuando no puede acompañarla a la incorporación a la Red del Municipio amazónico de Borba, que le significó un viaje de dos días utilizando avión y lancha. Los viajes no dependían enteramente de mi decisión personal. La causa de fondo era una mudanza en estrategias y prioridades al interior de la OPS. Se estaba en un proceso de desinflar la promoción de la salud y de remplazarla por  el concepto más general e inasible de desarrollo sustentable. Lo mismo sucedía con su proyecto estrella: municipios saludables, que era desplazado por otros proyectos locales o comunitarios, desde mi punto de vista, de menor alcance y capacidad de adhesión (tema interesante de discusión). Por las mismas causas no pude visitar la Red Pernambucana de Municipios Saludables, dirigido por otra mujer de empuje, la Dra. Ronice Franco de Sá, a la que pude seguir únicamente por el resultado de sus evaluaciones y sus  publicaciones.

Más allá de esta disculpa tardía, la conclusión que quiero subrayar es que cualquier proyecto de esta naturaleza tiene como requisito fundamental, el liderazgo y la fuerza de voluntad de quienes lo dirigen. La Red de Municipios Potencialmente Saludables cumple sobradamente con este prerrequisito y los municipios que de ella participan hacen su esfuerzo por plegarse a las orientaciones y políticas que los harán cada día más saludables.