viernes, 6 de septiembre de 2019

Bolivia: tendencias electorales de noviembre 2018 a agosto de 2019


Por Arnaldo Aliaga Pacheco y Fernando Rocabado Quevedo

Inferencia Bayesiana para el pronóstico de los resultados de las elecciones presidenciales en Bolivia

En este documento se presenta una metodología bayesiana para el pronóstico de los resultados de las elecciones presidenciales del 20 de octubre de 2019 en Bolivia. Esta metodología ha sido desarrollada para complementar el seguimiento que hace el periódico Página Siete, a partir de las encuestas de la empresa Mercados y Muestras, de las elecciones presidenciales, siendo la segunda vez que hacemos este cálculo predictivo, aunque en la ocasión hicimos algunas modificaciones al modelo inicial, principalmente en lo referido al manejo de los “indecisos”.

                                     Cuadro 1. Preferencias electorales por mes y trimestres (Encuestadora: Mercados y Muestras)

Fecha
No Sabe/No Contesta
nov-18
29%
34%
4%
17%
dic-18
30%
39%
4%
20%
ene-19
32%
32%
4%
25%
feb-19
31%
30%
7%
25%
mar-19
31%
32%
8%
20%
abr-19
34%
28%
8%
24%
may-19
34%
28%
10%
24%
jul-19
35%
27%
11%
23%
ago-19
34%
27%
13%
22%





 nov a ene
30%
35%
4%
21%
dic a feb
31%
34%
5%
23%
ene a mar
31%
31%
6%
23%
feb a abr
32%
30%
8%
23%
mar a may
33%
29%
9%
23%
abr a jul
34%
28%
10%
24%
may a ago
34%
27%
11%
23%

El interés del estudio es estimar la proporción de votantes para cada uno de los tres candidatos más importantes en la contienda presidencial: Evo Morales, Carlos Mesa y Oscar Ortiz. Para su implementación, se requiere resumir la información previa en forma de una distribución de probabilidad denominada distribución “a priori”. La fuente de información, que se actualizará constantemente, se resume en la función de verosimilitud. Estas dos fuentes de información, la distribución a priori y la función de verosimilitud, se combinan por medio del teorema de Bayes, induciendo una nueva distribución denominada la distribución a posteriori de donde se obtiene la estimación bayesiana de la intención de voto para los tres candidatos.  Es decir, en términos estadísticos, nuestra función a priori (distribución Dirichlet) está dada por 𝑃(𝐷|Θ) y la verosimilitud (distribución Multinomial) por 𝑃(Θ), así la distribución a posteriori (distribución Dirichlet) es: 𝑃(Θ|𝐷) ∝ 𝑃(𝐷|Θ) 𝑃(Θ).

En la actualidad estamos utilizando las últimas nueve encuestas realizadas desde los meses de noviembre-2018 a agosto-2019, con las que se han obtenido siete medias móviles trimestrales. construidas con las nueve encuestas. De esta forma, se obtienen estimaciones de la intención de voto en diferentes puntos del tiempo. El cuadro 1 nos da los resultados (en porcentajes) obtenidos por Página Siete y, en la parte inferior, los promedios móviles de tres en tres meses. La última columna corresponde a los indecisos. Los resultados de las encuestas de Página Siete los hemos colocado, también, gráficamente en la Figura 1 y, sus promedios móviles, en la Figura 2.

Figura 1. Preferencias electorales por mes (Información encuestas)


Figura 2. Preferencias electorales por trimestres (Información encuestas)

El manejo de “los indecisos” (No sabe, No contesta más los otros partidos más pequeños) se ha hecho distribuyéndolos (asignación) en cada encuesta mediante la distribución de potencia, que combina las dos formas más conocidas de distribución, que son la distribución uniforme y la distribución proporcional, la primera asigna los indecisos de manera equitativa y, la segunda, proporcionalmente; mientras que la asignación de potencia combina ambas (no promedia). Como la metodología requiere que los porcentajes sumen 100%, se hace necesario repartir, entre los tres candidatos, el porcentaje de “los indecisos”, pero como en la realidad no todos “los indecisos” votarán por alguno de los candidatos, es decir, como la predicción de los porcentajes que obtendrían los tres candidatos no sumarán 100 %, disminuimos al resultado del modelo un 50% de “los indecisos” , o sea, solo distribuimos al 50% de “los indecisos”, dejando para el resultado final la otra mitad de “los indecisos”.

Con los porcentajes de preferencias electorales para los tres candidatos de mayor votación que presentan cada una de las encuestas se obtiene una población simulada de preferencias electorales de 7 millones de votantes, que es aproximadamente la población votante del país.
El último paso consiste en ejecutar el modelo bayesiano 3.000 veces. Cada iteración es una simulación de las elecciones por el método de Monte Carlo, de una muestra de 2.000 votantes, con porcentajes de voto que varían según la distribución definida en el paso anterior. Los resultados en esas simulaciones permiten calcular las probabilidades que tiene cada candidato de lograr cierto porcentaje de preferencia en el percentil 50; en el 2,5 y en el 97,5 percentil y, además, las probabilidades que tiene cada candidato de ganar.

Resultados. - Con estas 3.000 simulaciones se ha obtenido el Cuadro 2, que nos da el porcentaje de preferencia para cada candidato en el percentil 50 y en el 2,5 y en el 97,5. En el caso de Evo Morales estos porcentajes de preferencia se mantienen casi estables, con un máximo de 39% en enero 2019 y un mínimo de 36% en tres meses: diciembre, febrero y marzo. En el mes de agosto 2019 la estimación de preferencia es de 37% del electorado, con un margen de preferencia que va de 35% en el percentil 2,5, a 39% en el percentil 97,5.
En el caso de Carlos Mesa los porcentajes de preferencia tuvieron su pico de 39%, en diciembre de 2018, desde donde han ido disminuyendo hasta 30% en agosto 2019.   En este mes el margen de preferencia va desde 28% en el percentil 2,5, hasta 32%, en el percentil 97,5.
En este mes, la diferencia de porcentajes alcanzados por ambas fórmulas, en el percentil 50, es de 7%, cifra que le permitiría al candidato Carlos Mesa, llegar a una segunda vuelta, puesto que se requiere una diferencia menor al 10% requerido para aspirar a esta segunda vuelta. 
En cuanto al candidato Oscar Ortiz, sus porcentajes de preferencia han ido aumentando constantemente, hasta casi duplicarse en agosto último, con relación a la primera encuesta. Aumentaron desde 9%, en noviembre 2018, hasta 17% en agosto.   En este mes su margen de preferencia va desde 16% en el percentil 2,5, hasta 19%, en el percentil 97,5. Sin embargo, constatamos que, si bien sube en la simulación, no alcanza porcentajes como para cuestionar o polarizar las fuerzas con ninguno de los candidatos mencionados anteriormente.

                  Cuadro 2. Estimación de los porcentajes de preferencia por percentiles y mes (Método de Monte Carlo)

Tiempo
Evo Morales 2.5%
Carlos Mesa 2.5%
Óscar Ortiz 2.5%
Evo Morales (50%)
Carlos Mesa (50%)
Óscar Ortiz (50%)
Evo Morales 97.5%
Carlos Mesa 97.5%
Óscar Ortiz 97.5%
nov-18
34
36
8
37
38
9
39
40
10
dic-18
34
39
7
36
41
8
38
43
9
ene-19
37
34
8
39
36
9
41
39
10
feb-19
33
34
11
36
36
12
38
38
14
mar-19
34
34
11
36
36
12
38
38
14
abr-19
35
32
11
37
34
13
40
36
14
may-19
35
31
13
37
33
14
39
35
16
jul-19
36
29
14
38
32
15
40
34
17
ago-19
35
28
16
37
30
17
39
32
19

En la figura 3, pero principalmente en la Figura 4, de promedios móviles por trimestre, se perciben tres hechos fundamentales. Primero, que la línea de tendencia de Evo Morales es casi constante, horizontal, y se encuentra cercana al 37% del electorado. Segundo, que Carlos Mesa ha tenido un descenso, suave pero constante, hasta ubicarlo alrededor del 31%. Tercero, se verifica un ascenso similar en constancia del candidato Oscar Ortiz, que termina a fines de agosto, como en el 16%.

                                                 Figura 3. Tendencia de los porcentajes de preferencia por mes                               
                                                      

                                                               Figura 4. Tendencia de los porcentajes de preferencia por trimestre                                                 



Finalmente, con los datos proporcionados por el ejercicio, se han estimado las probabilidades de ganar de los dos primeros candidatos (Cuadro 3), puesto que el tercero no tiene ninguna probabilidad de hacerlo, y comprobamos que las probabilidades de ganar de Evo Morales, tal como iban las cosas hasta el 21 de agosto 2019, era del 100%, pero, sin alcanzar el 40% de la votación y sin aventajar con el 10% de los votos a su inmediato seguidor, Carlos Mesa.


 Cuadro 3. Estimación de las probabilidades de ganar
Tiempo
Evo Morales
Carlos Mesa
nov-18
13,0%
87,1%
dic-18
0,1%
99,9%
 ene-19
88%
12%
 feb-19
49%
51%
 mar-19
52%
48%
 abr-19
98%
2%
 may-19
100%
0%
 jul-19
100%
0%
 ago-19
100%
0%

Tiempo
Evo Morales
Carlos Mesa
 nov a ene
15%
85%
dic a feb
39%
61%
ene a mar
77%
23%
feb a abr
69%
31%
mar a may
90%
10%
abr a jul
100%
0%
may a ago
100%
0%



Conclusiones. -  Los modelos como el presente, son cada vez más utilizados como instrumentos de seguimiento y predicción de procesos eleccionarios en todo el mundo, principalmente en Europa y EEUU.  El ejercicio de simulación que se ha realizado, haciendo una inferencia para la población total de votantes del país, y mediante 3.000 simulaciones de encuesta, con 2000 muestras cada una, nos permite verificar, después de nueve encuestas y de asignar “los indecisos” a las tres primeras fuerzas en competencia, una estabilidad en los votos del MAS, que puede representar el techo de su votación, probablemente proveniente de su voto duro; también, un ascenso de la votación de Oscar Ortiz, en desmedro de la votación de Carlos Mesa.  El origen de estos votos de Bolivia Dice NO, sin duda vienen del mesismo, puesto que “los indecisos” se mantuvieron casi constantes.  A pesar de esta situación, y las probabilidades casi ciertas de ganar la elección en su primera vuelta, el Candidato del MAS no tendría los votos suficientes para una victoria definitiva, lo que significa que habría una segunda ronda eleccionaria entre los dos candidatos con mayor votación: Evo Morales y Carlos Mesa. Esta situación llevaría al proceso eleccionario a una real y verdadera polarización, que obligaría al electorado a elegir, en una segunda oportunidad, entre uno de los dos candidatos mencionados.

Los datos que se muestran en este estudio, pueden sufrir algunos cambios notables en los próximos días, debido a cambios en la coyuntura, emergentes de la percepción de la población sobre el rol que las políticas del Gobierno han jugado en el inicio y mantenimiento del voraz incendio de la Chiquitanía, que contó con la participación de los demócratas y de Oscar Ortiz, en particular, quienes firmaron los decretos que dieron origen a este desastre. Esta situación podrá medirse con claridad en la próxima encuesta.

Pese a fallas orgánicas notables en la alianza de Comunidad Ciudadana, sus posibilidades de retomar un ritmo de ascenso no están descartadas, lo que requiere más activismo y presencia en todos los rincones del país. El liderazgo de su candidato, que es cada vez más notorio y se da con mayor fuerza, requiere del acompañamiento de su militancia más dura y de sus candidatos al legislativo. Debe evitarse toda percepción de contentamiento y suficiencia por parte de su militancia y de la ciudadanía en general. La diferencia de votos debe ser disminuida a como dé lugar.

En esto puede jugar un rol fundamental, frenar la agresividad de Oscar Ortiz y mostrar el juego funcional que realiza a favor del MAS, puesto que ha concentrado su campaña en dañar la imagen de Carlos Mesa, su compañero de oposición.